La rotonda Paicaví es un punto neurálgico de la ciudad, en el que convergen quienes se desplazan hacia distintos sectores. Tras los hechos de violencia que se concentraron en el sector a partir de octubre pasado, era una demanda de la comunidad que volviera a su normal funcionamiento.

El intendente Sergio Giacaman, junto a los seremis de Vivienda y Urbanismo, James Argo; de Transportes y Telecomunicaciones, Jaime Aravena; y el alcalde Álvaro Ortiz, encabezaron la puesta en servicio de todos los semáforos de esta intersección.

“De un total de 71 puntos intervenidos, ya se encuentran 70 repuestos o en ajustes finales, uno solo pendiente y quedan otros semáforos, que son alrededor de seis o siete, que van a ser abordados por la vía regular de financiamiento, es decir, por conservación vial”, explicó el seremi Argo.

La reposición de semáforos se ha realizado de la mano con la cartera de Transportes, de manera que las nuevas instalaciones queden reguladas desde la Unidad Operativa de Control de Tránsito.

En este sentido, el seremi Jaime Aravena hizo referencia a la importancia que tiene este punto para el flujo vial de la provincia de Concepción.

Por su parte, la presidenta de la Junta de Vecinos de Remodelación Paicaví, María Eugenia Álvarez, destacó que se repongan los semáforos, dado que en el sector vive un número importante de adultos mayores, quienes se veían particularmente afectados por la falta de regulación en los distintos cruces.

La inversión del Minvu para reponer los semáforos dañados alcanza los mil millones de pesos, por lo tanto, el llamado la ciudadanía es a cuidar estos bienes públicos, como enfatizó el intendente Sergio Giacaman.

Mismo llamado hizo el alcalde Álvaro Ortiz, quien indicó que “ahora depende de todos nosotros ocuparlos y aprovecharlos por mucho tiempo”. El jefe comunal agregó que fueron vandalizados 75 de los 270 puntos de semáforo existentes en Concepción.

La rotonda Paicaví, fue uno de los puntos más dañados en el Gran Concepción tras el estallido social, por lo que requirió un trabajo mayor, no solo para reponer las estructuras de los semáforos, que debieron ser reforzadas, sino que además el reemplazo del cableado que quedó inutilizado.