Una denuncia por abuso sexual contra menores de 14 años fue efectuada durante la jornada de este miércoles por la comunidad educativa de la escuela Villa Centinela Sur de Talcahuano, luego de un operativo médico organizado por el Ministerio de Salud que, según se acusó, habría sido aplicado a estudiantes de 5° año básico con el objetivo de evaluarles a través de la Ficha CLAP. Al respecto, autoridades locales y nacionales confirmaron que el hecho será investigado tanto a nivel sectorial como por la Justicia. 

La situación fue dada a conocer por la propia escuela, que junto con suspender las clases durante este miércoles y jueves, informó que la presunta vulneración habría tenido lugar en el marco de un operativo de salud previamente calendarizado, en el que, según acusan los apoderados, el médico a cargo del procedimiento habría afectado «tanto física como psicológicamente» a los menores.

Junto con condenar «tajantemente» el caso, la seremi de Educación del Biobío, Elizabeth Chávez, aseguró que todos los antecedentes ya se encuentran a disposición de la Fiscalía y de la dirección regional de la Superintendencia de Educación, para de esa forma establecer eventuales responsabilidades. 

En lo que respecta a su cartera, la autoridad zonal adelantó qué será relevante esclarecer si el establecimiento cumplió o no con los respectivos protocolos previos.  

Por su parte, el alcalde de Talcahuano, Henry Campos, detalló que aunque operativo médico se encontraba establecido «en la programación del Ministerio de Salud»tanto la directora de la escuela Villa Centinela Sur como el municipio efectuaron denuncias ante la Fiscalía y la Oficina de Protección de Derechos de Infancia (OPD) por «situaciones que podrían ser constitutivas de delitos como abuso sexual».

El Congreso reacciona

El caso generó indignación, sobre todo, dentro de la Cámara de Diputadas y Diputados. Por ejemplo, la representante por el distrito 20, Francesca Muñoz (RN), efectuó un llamado a «investigar a fondo» y a otorgar protección inmediata a los niños y las niñas que vieron vulnerados sus derechos.

En tanto, el diputado por el mismo distrito, Eric Aedo (DC), se comprometió a oficiar «al municipio de Talcahuano» y al propio Servicio de Salud por la afectación de los menores, quienes, detalló, poseen «una alta vulnerabilidad social». En ese marco, el parlamentario también efectuó una crítica a las «señales» dadas por el Ministerio de Educación durante las últimas semanas.

Los dichos de Aedo se basan, en una buena parte, en lo informado inicialmente por un medio de circulación nacional, que durante la tarde de este miércoles afirmó que la situación habría tenido lugar en el marco de una charla asociada a la afectividad y la sexualidad.

Ello no solo fue desmentido por la secretaría ministerial y el municipio, sino que por el propio ministro de Educación, Marco Antonio Ávila, quien junto con manifestar su repudio, reiteró que se trató un «operativo de salud, similar al control sano», que no contaría con la participación de la cartera que encabeza.