Por Dra. Camila Fernández Ibáñez, Directora Centro COPAS Coastal, Universidad de Concepción

Cada 8 de junio celebramos el Día Mundial de los Océanos y desde el Centro de Investigación Oceanográfica COPAS Coastal tratamos de hacer presente el compromiso de la humanidad con la naturaleza en diversas instancias. Visitamos establecimientos educacionales, escribimos notas como ésta, nos congregamos para conmemorar el esfuerzo que significa hacer investigación marina en el Chile de hoy y lo mucho que les debemos a los oceanógrafos de ayer.

Nuestro país ha acelerado su desarrollo oceanográfico de forma excepcional y sólo se compara con la astronomía. Sin embargo, el océano requiere protección y respeto de una forma más evidente que el cielo estrellado.

El océano es la matriz en la que se mueve todo en el planeta. No hay una gota de agua que no haya sido salada en algún minuto gracias al ciclo hídrico del que todos nos beneficiamos. Este 2022, la efeméride nos sorprendió en la Patagonia, viviendo esa relación entre glaciar, río, océano, patrimonio y diversidad es una experiencia de vida. Caleta Tortel, un lugar remoto de importancia global ubicado entre los dos Campos de Hielo y en contacto con el río más caudaloso de Chile: el río Baker.

Tortel ha forjado una historia alrededor del agua. Es el único pueblo en Chile donde no hay calles, sino pasarelas. Tortel es agua, hielo, bosques y océano y eso me recuerda que para entender el océano debemos estudiarlo junto a su ecosistema costero terrestre, la atmósfera y el agua dulce, y porque no también, debemos incluir nuestro rol en el paisaje. Esa es la misión del Centro COPAS Coastal, realizar investigación de punta desde la interdisciplina para entender y describir la transición del océano costero y su impacto en el ecosistema. En Tortel, el Centro COPAS ha estado ya 14 años trabajando para describir el sistema de fiordos y estimar su vulnerabilidad al cambio climático y hemos podido contribuir a la educación marina de niñas y niños que hoy ya son adultos y que llevan consigo una conciencia ambiental privilegiada.

Las aguas de Tortel reciben desde el mar la huella antrópica en forma de plástico, que es uno de los problemas más grandes del siglo 21 para el océano. Aquí el problema del plástico es en parte endémico y en parte importado por el océano. Hemos cuantificado tipos de microplásticos en sus aguas y sabemos que algunos tienen potencial para transportar patógenos y absorber contaminantes. En COPAS Coastal buscamos entender estos y otros aspectos del sistema marino costero y es en Tortel justamente donde lanzamos un nuevo programa de monitoreo multidisciplinario con miras a describir, entender y anticipar los cambios que el clima y el ser humano tendrán en este ecosistema.

Al mismo tiempo, estamos trabajando en una plataforma de divulgación que será parte del sistema de pasarelas que esperamos también se integre a la identidad de la zona. El 8 de junio tuve el privilegio de dar a conocer nuestros proyectos y conversar sobre la vulnerabilidad de este ecosistema al alcalde de Tortel, Abel Becerra, y a niñas y niños de colegios y a la comunidad del sector en una visita a su radio local; siendo ésta una excelente forma de festejar el ser científica y conmemorar una vez más el Día del Océano.