La Cámara de Diputadas y Diputados escogió hoy, a través de un sorteo, a los primeros 78 parlamentarios que deberán cumplir la exigencia de un test de drogas para «asegurar la eficiencia, la probidad y el correcto desempeño» de sus funciones.

En la lista figuran cuatro representantes de la Región del Biobío: Por el Distrito 20, los diputados Eric Aedo y Leonidas Romero; mientras que por el Distrito 21, la diputada Clara Sagardía y el diputado Cristóbal Urruticoechea.

Estos exámenes se aplicarán de manera semestral y aleatoria. El resultado obtenido será informado al secretario de la Cámara, quien deberá comunicar por escrito dicho resultado al diputado sometido a control.

En caso de que algún parlamentario se niegue injustificadamente a la realización del examen, será sancionado con las medidas que determine la Comisión de Ética y Transparencia de la Cámara.

Si una diputada o diputado que haya dado positivo, deberá controlarse nuevamente en el siguiente examen.

Además, los diputados y diputadas deberán presentar una autorización anticipada de levantamiento de secreto bancario por el lapso de un año. Quien se niegue al otorgamiento de esta autorización, será sancionado por la Comisión de Ética y Transparencia.

Junto con el examen aleatorio, el parlamentario o parlamentaria deberá presentar las cartolas de todas las cuentas bancarias y de instituciones financieras a su nombre, de los últimos 6 meses, anteriores a la realización del examen.

Si se detectan movimientos que superen las 800 unidades de fomento, durante el lapso de un mes, los antecedentes se derivarán a la Comisión de Ética y Transparencia de esta Cámara. Ahí, el diputado o diputada deberá justificar el movimiento financiero.

Si la persona sorteada se niega injustificadamente a entregar esta información, será sancionada con llamado al orden, amonestación o censura. Accesoriamente, con multas de hasta un 15% de su dieta parlamentaria.

La diputada o diputado cuyo examen de positivo deberá inhabilitarse de las votaciones relacionadas con la prevención y control de consumo de drogas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas. Lo mismo que quien se niegue a someterse al examen.