Considerando desde el 7 de marzo de este año, fecha en que se inició oficialmente la vacunación de cuarta dosis contra el Covid-19, 314 personas han fallecido a causa del virus en la región del Biobío, 278 de ellas(88,5%) sin contar con la última inoculación.
En tanto, de las 1.061 defunciones por Covid-19 desde que comenzó a aplicarse la dosis de refuerzo el 11 de agosto de 2021, 659 personas, que equivalen al 62%, perdieron la vida sin contar con ese procedimiento.
“Las cifras son claras y demuestran una vez más el riesgo que implica no mantener la vacunación al día, además de evidenciar la importancia de la inmunización en la protección de la salud y su incidencia en evitar agravarse o perder la vida a causa de la enfermedad”, indicó el seremi de Salud, Eduardo Barra.
Considerando las 4.279 personas que han fallecido desde que se inició la pandemia y hasta el 9 de mayo en la región, los grupos más afectados son los mayores de 80 años, con 36,7%; seguido por el segmento de 75 a 79 años, con 14%; el grupo de 70 a 74, con 12,9%; de 65 a 69, con 11%; y de 60 a 64 años, con un 8,9%. La mortalidad sigue disminuyendo a medida que se reduce el tramo de edad.
“Al analizar los fallecidos totales desde que se inició la pandemia, las estadísticas revelan que la población más afectada son las personas de 60 años y más, que concentran el 83% del total de fallecimientos. Lo anterior, requiere de una mayor responsabilidad por parte de la población más joven, ya que manteniendo conductas de autocuidado y poniendo al día la vacunación están protegiendo también a las personas mayores, que siguen siendo el segmento más propenso a perder la vida por causa del Covid-19”, añadió Barra.