Por: Paúl Gómez Canchong, coordinador de Divulgación y Educación Científica Centro COPAS Coastal, Universidad de Concepción.
Este sábado 8 de junio, como cada año desde 2009, celebramos el Día Mundial del Océano, una jornada instaurada por la ONU para reflexionar sobre nuestra relación con el océano. El lema de 2024, «Despertar nuevas profundidades», nos invita a un doble desafío: profundizar en la investigación de estos espacios aún en gran parte inexplorados (sólo conocemos el 10%) y repensar urgentemente nuestra relación con el océano.
El tiempo para actuar se agota. El Reporte sobre el Estado del Océano 2024, presentado este lunes, nos entrega un panorama alarmante: el océano se calienta al doble del ritmo que hace 20 años, con 2023 registrando uno de los mayores aumentos de temperatura desde la década de 1950. A pesar de actuar como sumidero de carbono, absorbiendo grandes cantidades, se prevé que la acidificación de los océanos aumente en más del 100% para finales de siglo, mientras la desoxigenación se vuelve más frecuente, dejando zonas sin oxígeno y provocando varamientos de especies cada vez más frecuentes.
Ante este escenario crítico, desde el Centro COPAS Coastal de la Universidad de Concepción estamos comprometidos con ambos desafíos del lema de este año. Por un lado, desarrollamos sistemas de observación del océano costero, convirtiendo a las regiones de Aysén y Biobío en las dos más observadas del país. Contribuimos al Plan de Adaptación al Cambio Climático en Pesca y Acuicultura, y contamos con un creciente banco de sonidos submarino de utilidad para el Comité Operativo para el Control del Ruido Submarino y los programas de conservación de grandes cetáceos, entre otros aportes para conocer mejor el funcionamiento de nuestro océano.
En cuanto al segundo desafío, desde la Unidad de Divulgación y Educación Científica del Centro COPAS, promovemos la Cultura Oceánica en la sociedad chilena, un faro de esperanza ante la problemática oceánica. Este concepto, que abarca la comprensión, valoración y el cuidado del océano, es clave para impulsar un cambio de comportamiento hacia la sostenibilidad, optimizar el uso de los recursos marinos y fortalecer la implementación de programas de conservación.
La Cultura Oceánica no es sólo un concepto académico, sino una forma de vida que nos invita a reconectarnos con el océano, comprender su funcionamiento y asumir la responsabilidad de protegerlo. Se trata de ir más allá de la contemplación de la belleza marina y adentrarnos en su compleja dinámica, reconociendo su valor intrínseco y su papel fundamental en la regulación del clima, la producción de alimentos y la oxigenación del planeta.
En esa línea, hemos desarrollado un curso online masivo abierto destinado a toda la comunidad universitaria, con cerca de 300 inscritos. Además, en el marco del XLIII Congreso de Ciencias del Mar, realizamos la octava versión del Simposio en Divulgación de Ciencias del Mar, donde desde su primera versión han participaron más de 30 ponentes.
Una de las principales conclusiones, en todos estos años señala que el trabajo interdisciplinario y participativo son fundamentales para instalar la cultura oceánica en las diversas audiencias con las que trabajamos.
El trabajo multidisciplinario también es la esencia del Grupo de Trabajo en Cultura Oceánica (GT-COCEAN) del Comité Oceanográfico Nacional (CONA), creado el 9 de junio de 2023. Su objetivo es promover y difundir la cultura oceánica en Chile para que, de manera colaborativa y participativa, contribuya a reconectar nuestra sociedad con el mar chileno, con el propósito de contar con un patrimonio oceánico más conocido, valorado y protegido por toda la sociedad. Desde este lunes, formo parte de este grupo junto a otras colegas que participaron del Simposio de Divulgación. Tenemos la motivación necesaria para aportar nuestro granito de arena, pero una tarea tan titánica como esta requiere del aporte de cada persona.
¿Estás dispuesto a aportar el tuyo? Juntos podemos despertar las profundidades y construir un futuro más sostenible para nuestro océano y nuestro planeta.