Con el objetivo de trabajar en beneficio de las víctimas de la violencia, el Gobernador Rodrigo Díaz, y el Subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, firmaron en La Moneda un convenio de colaboración.

El documento establece un mecanismo de trabajo conjunto que permitirá al Gobierno Regional del Biobío disponer de fondos para atender la reparación a las víctimas de la violencia rural que actualmente se encuentran en “lista de espera” producto de la burocracia del Estado.

Así, se pone como objetivo ir en ayuda de aquellas personas que se encuentran registradas como víctimas de la violencia rural y que han debido esperar por uno o dos años, sin tener, hasta ahora, reparación de sus enseres siniestrados.

En ese sentido, Rodrigo Díaz, manifestó que “las personas que son víctimas de la violencia están debidamente catastradas por Interior, por tanto, el convenio que estamos firmamos nos va a permitir saber a quién tenemos que llegar, porque habiéndose requerido auxilio y no entregándose los recursos, nosotros podemos reparar esta situación”.

Del mismo modo, la máxima autoridad regional mencionó que no se dejará de lado el apoyo en salud mental. “Quien ha sufrido un hecho traumático requiere acompañamiento, y en el caso de la Región del Biobío se carece de ayudas en salud mental. Este dinero que vamos a destinar en la región, del orden de $5 mil millones de pesos, nos va a permitir eliminar las listas de espera y complementar las ayudas en salud mental para las personas”, expresó.

Por su parte, el Subsecretario Monsalve, indicó que “en algunos casos el Estado no logra reparar el patrimonio dañado hasta dos años después, porque los recursos destinados al programa de reparación de víctimas de violencia rural no eran suficientes”.

En ese sentido, Monsalve agregó que “el Gobierno ha aumentado el presupuesto de 2023 y el Presidente comprometió llegar a $7 mil millones para poder atender durante este año a las víctimas de 2023, pero hay víctimas que están esperando hace atiempo”.

El subsecretario Monsalve concluyó que este convenio “recoge el espíritu de entender que este es un problema país en que todos debemos colaborar”.