El Fondo Nacional de Reconstrucción del Ministerio de Hacienda finalizó su gestión para la catástrofe correspondiente a los incendios forestales de febrero de 2023, que afectaron a las regiones de Biobío, Ñuble y La Araucanía, con un positivo balance: dispuso de $3.999 millones y financió 34 proyectos.

Este mecanismo se activó para fomentar aportes de privados destinados a financiar la reconstrucción de las zonas afectadas y estuvo disponible hasta febrero de 2025 para recibir donaciones y financiar iniciativas de reconstrucción. Contaba con un saldo inicial de $3.316 millones y recibió $91 millones en aportes en dinero para obras específicas, $589 millones en especies valorizadas donadas a través del Fondo, y $2.478.000 correspondiente a las donaciones genéricas en dinero entre el 3 de febrero del 2023 y junio 2023.

En total, se financiaron 34 proyectos gracias a las donaciones de privados, firmando convenios con ejecutores por un total de $2.723 millones. Si bien el monto disponible es mayor al ejecutado, la secretaria ejecutiva del Fondo, Trinidad Undurraga, explicó que “en el transcurso de estos dos años de funcionamiento del Fondo se activaron otras catástrofes en forma paralela: una fue el frente climático de junio y agosto de 2023 en la zona centro sur del país, otra fue el incendio de Valparaíso en febrero 2024 y otra el frente climático de Biobío en junio 2024. Esto obligó al Fondo a visibilizar cada una de estas catástrofes y a canalizar recursos para todas ellas, lo que implicó la implementación de diferentes estrategias de llegada a los privados para gestionar su apoyo hacia los territorios afectados”.

Asimismo, precisó que el área con mayor financiamiento fue salud con $979.476.000 destinados a la reposición de 9 vehículos. Le siguió el área de desarrollo regional que recibió $760.440.143 para financiar 4 proyectos de agua potable rural (APR), la reposición de 3 sedes sociales y un proyecto de pintura de infraestructura comunitaria. Y, en tercer lugar, el área de vivienda recibió $742.249.200 para la reconstrucción de 30 módulos de ampliación y la reposición de equipamiento de 550 viviendas.

Proyectos con donación específica

El Fondo de Reconstrucción financió un total de 14 iniciativas con los recursos donados de forma específica por privados. De estos, seis corresponden al área de agricultura y fueron destinados a polines para cerco y reconstrucción de invernaderos, lo que benefició a afectados de 6 comunas de Biobío y La Araucanía.

Dos corresponden al área de vivienda, con los que se construyeron módulos de ampliación para 30 familias de la comuna de Ránquil, en la región de Ñuble. Otras cuatro propuestas vinculadas a desarrollo regional permitieron reparar los sistemas de agua potable de 4 comunas del Biobío. Finalmente, dos proyectos corresponden a educación, con los cuales se repuso y equipó 2 rucas educativas en las comunas de Lumaco y Mulchén.

Undurraga destacó el aporte de los privados para apoyar a damnificados de catástrofes.

El total de estos equipamientos ya se entregaron a los municipios ejecutores. Salvo algunos que están en proceso de cierre administrativo de convenios, el resto ya ha sido finalizado completamente.

Proyectos con donación genérica

También se financiaron 20 proyectos por un monto total de $2.058 millones, los que fueron priorizados por el Comité Asesor del Fondo: 9 proyectos de vehículos de salud beneficiaron a 9 comunas de las regiones de Ñuble, Biobío y Araucanía; uno de equipamiento de viviendas ayudó a más de 550 familias afectadas; 4 del área de desarrollo regional permitieron la reconstrucción de 3 sedes sociales y la pintura de espacios comunitarios; con 2 de educación se reconstruyeron los juegos de dos establecimientos
educacionales afectados por los incendios; y se financió un proyecto piloto de prevención que aborda equipamiento de comunicación para juntas de vigilancias rurales de 4 comunas de La Araucanía.

Aún restan tres proyectos por finalizar, sin embargo, están en etapa de ejecución con fecha de término en 2025. Estos son: Sede Social La Huerta en Santa Juana, Sede Social Las Tejedoras en Nacimiento, y el proyecto Juego de Patio Establecimiento Educacional Escuela San Antonio en Tomé, todos de la región del Biobío.

El objetivo del Fondo Nacional de la Reconstrucción fue creado con la ley 20.444, el año 2010.