Aumento de las temperaturas medias, eventos meteorológicos extremos y la subida del nivel del mar serán algunos de los fenómenos que enfrentaremos de acuerdo con el alarmante VI informe IPCC de las Naciones Unidas. El documento señala que el cambio climático es generalizado y se está intensificando con el paso de los años, siendo el factor humano el principal desencadenante de esta situación.

La investigación entrega estimaciones sobre los altos índices de emisiones de dióxido de carbono (CO2) en el planeta, e instala las probabilidades de sobrepasar el nivel de calentamiento global, superando los 1,5 ºC en los próximos 20 años.

En este contexto, especialistas del Programa Transdisciplinario en Medio Ambiente (PROMA) y el Center for Climate and Resilience Research (CR2) de la Universidad de Chile, cuestionan las decisiones que se han tomado a nivel país y piden trabajar transdisciplinariamente para enfrentar el desafío.

La académica integrante de CR2 y miembro de IPCC, Laura Gallardo, asegura que “la evidencia científica sobre el calentamiento global cada vez se vuelve más sólida e irrefutable. Las temperaturas aumentan y con ello, la gravedad de los impactos, por lo que comenzamos a tener múltiples fenómenos simultáneamente”, indicó.

El escrito menciona 98 veces a Chile, 34 de ellas guardan relación con fenómenos climáticos que actualmente enfrenta el país. Las bajas precipitaciones y cobertura nival, la arificación y el aumento de incendios forestales son fenómenos que se manifiestan hace más de 10 años, sin embargo y pese a la advertencia de expertos, no hay mejoras.

Incongruencias en el accionar nacional

Chile se encuentra suscrito a diversos acuerdos internacionales que lo invitan a adoptar medidas estratégicas para contribuir a la mitigación del cambio climático mundial. El país ha impulsado diversos planes de acción, tales como la Estrategia Climática a Largo Plazo y el Programa de Gestión del Carbono, sin embargo, el Proyecto de Ley Marco de Cambio Climático (PLMCC), aún se encuentra en tramitación.

Este hecho posibilitó que la Comisión de Evaluación Ambiental (Coeva) de Coquimbo aprobara el polémico proyecto minero-portuario Dominga. Ante ello, las organizaciones ambientales y especialistas de PROMA y CR2 manifestaron sus preocupaciones ante las incongruencias del accionar nacional en materia medio ambiental.

La profesora Gallardo asegura que “este tipo de contradicciones vitales no nos avecinan a un escenario positivo. Debemos disminuir las disonancias cognitivas y entender que mientras más tarde se tomen medidas, más costoso será nuestro futuro. Resulta importante continuar impulsando iniciativas como el programa FONDAP, para conjugar las capacidades científicas en un sentido amplio”.

Para el académico de la Facultad de Ciencias e integrante de PROMA, Javier Simonetti, “debemos ser ambiciosos en las metas que nos fijamos y dar señales claras a la población. Esta decisión que se ha tomado a escala regional es una bofetada a todos quienes han demostrado que el proyecto Dominga tiene un impacto contundente sobre el entorno. Es una vergüenza que aceptemos este tipo de acciones, sobre todo cuando estamos en conocimiento de la preocupante situación mundial”.

A su vez, el experto agregó que la biodiversidad chilena ya está siendo afectada por el cambio climático, “las especies se están desplazando, las modificaciones en el uso del suelo son reales y en la medida en que Chile solo se preocupe de un poder económico y no tome en cuenta la opinión de la academia, el futuro no es alentador”.