La votación de una nueva prórroga del estado de excepción constitucional en la Macrozona Sur cerró el primer año legislativo del periodo 2022-2026, marcado en el Congreso por la irrupción de nuevas figuras y fuerzas políticas que, para partidarios y detractores, han agitado las estructuras establecidas.

El académico y analista político Lucas Serrano, sostuvo que el actual Congreso, en particular la Cámara de Diputadas y Diputados, «es el más disperso» desde la vuelta a la democracia, con «fuerzas nuevas, que se mueven más rápido y que hacen difícil anteponerse y llevar los votos».

En esta línea, se refirió a la complicada relación con el Ejecutivo, en particular con el ministerio Segpres, encabezado durante el primer año de la administración Boric por Giorgio Jackson y Ana Lya Uriarte.

Serrano reflexionó acerca de las complejidades que se pueden generar durante 2023, un año en el que a su juicio, «el Gobierno se tiene que ‘parlamentarizar'».

Evaluación del primer año

Cuatro parlamentarios comenzaron en 2022 su primer periodo como representantes del Distrito 20 de la Provincia de Concepción: Eric Aedo (DC), Roberto Arroyo (ex PDG, hoy independiente en la bancada Social Cristiana), María Candelaria Acevedo (PC) y Marlene Pérez (Ind-UDI).

La diputada Acevedo, única representante del oficialismo por esta zona, indicó que a pesar de «un ambiente muy dificil, logramos realizar un buen trabajo» y planteó que un eje de su gestión es socializar las distintas iniciativas con la comunidad, en particular, aquellas relacionadas a temáticas medioambientales y a la nueva Ley de Pesca, uno de los proyectos centrales del actual gobierno, y que la parlamentaria impulsa desde la presidencia de la Comisión de Pesca en la Cámara.

En tanto que la diputada Pérez destacó ser la parlamentaria del distrito con la mayor cantidad de proyectos presentados, el cumplimiento de su labor fiscalizadora, su rol como presidenta de la Comisión de Desarrollo Social y su «compromiso irrestricto con los adultos mayores, infancia y mujeres».

Tensiones internas

Entre los elementos que marcaron el año legislativo en la Cámara Baja estuvieron las polémicas protagonizadas por parlamentarios, siendo las más mediáticas aquellas que involucraron al diputado republicano Gonzalo de la Carrera, quien el 30 de agosto agredió físicamente a su par Alexis Sepúlveda y el 10 de enero interpeló en la Comisión de Constitución en duros términos al RN Diego Schalper.

Acusaciones constitucionales y mociones de censura tensionaron el ambiente, sin considerar interpelaciones y «funas» por redes sociales entre parlamentarios de distintos sectores y notas insólitas, como intervenciones en alemán en el hemiciclo y diputados llegando al Congreso con pelotas de fútbol y gorros de chef.

Para el diputado Félix González (PEV), quien cumple su segundo periodo en el Congreso, sus pares republicanos y del PDG ha aportado a la polarización «con posiciones muy distintas a las del resto del parlamento» y que los «malos tratos, agresividad verbal y física» han afectado al clima interno. Junto con pedir que se cumplan los reglamentos al interior de la Corporación, llamó a «cambiar la forma de hacer política».

Una petición similar realizó la diputada Pérez, quien insistió en que «no siempre se puede estar legislando desde las trincheras sólo con el interés de instalar un punto político».

Más dura en su crítica fue la diputada Acevedo, quien habló de fuerzas políticas «dedicadas a minar el trabajo en la Cámara» y de «sectores negacionistas y envalentonados en sacar a relucir retazos del pinochetismo».

Quien manifestó una visión distinta fue uno de los «experimentados» por el Distrito 20, el diputado Leonidas Romero, que integró la bancada republicana durante 2022 pero que hoy se define como independiente, y que sostuvo que se trata de críticas «destructivas» contra actores políticos que «han puesto seriedad y dignificado el cargo».

En entrevista con Radio UdeC en noviembre pasado, Vlado Mirosevic, presidente de la Cámara, planteó como un problema el «normalizar ciertas prácticas de indisciplina o falta de respeto entre nosotros» y adelantó que se trabajará en aumentar las sanciones internas. Asimismo, cuestionó a los llamados «díscolos», señalando que “son un grupo bastante transversal políticamente hablando, pero el resto quiere hacer su trabajo de manera seria, con sobriedad, sin estos espectáculos que vemos en la tele”.