La Región del Biobío sigue proyectándose como un polo energético para Chile tras la reactivación del Oleoducto Trasandino, infraestructura que conecta directamente Puesto Hernández, en la zona norte de Vaca Muerta, Argentina, con la Refinería Biobío de Enap, ubicada en Hualpén.

Al término de una visita técnica a la planta, el delegado presidencial regional, Eduardo Pacheco, destacó que a dos años de la recuperación de este oleoducto, “vemos que avanza de muy buena manera, sin ningún contratiempo, aumentando los niveles de crudo que están llegando y generando, por ejemplo, en el caso de Enap, una estabilidad respecto de la recepción de este insumo para las distintas tareas que desarrolla la empresa estatal y una serie de empresas internacionales que requieren de productos refinados”.

Construido en los años 90, el ducto de 425 kilómetros, permaneció sin operar por 17 años, hasta que en 2020 se iniciaron las gestiones para su recuperación. Finalmente, en 2023 retomó sus operaciones con aumentos sostenidos en los volúmenes transportados.

Pacheco recordó la “historia productiva, de trabajo conjunto”, entre Chile y Argentina.

En su etapa inicial, el oleoducto permitió exportaciones por 40 mil barriles diarios de crudo argentino, cifra que hoy alcanza los 80 mil barriles y sigue creciendo, gracias a una capacidad total cercana a los 110 mil barriles por día.

En agosto de 2024, Chile se convirtió en el principal comprador de petróleo argentino, superando a potencias como Estados Unidos y Brasil, con compras que totalizaron US$ 1.244 millones. Esta cifra representó el 35% de las exportaciones totales de crudo del país vecino, reflejando el creciente protagonismo de Chile en el mercado energético regional.

El gerente general de Oleoducto Trasandino, Joaquín Mantelli, entregó más detalles de su funcionamiento.

Mantelli agregó que “se están abriendo otras rutas hacia el Atlántico y, por lo tanto, salidas en distintos puntos, de modo que va a haber un rebalanceo de la cantidad de crudo. Lo que nosotros sí sabemos es que las proyecciones de crecimiento son gigantescas”.

Javier Sepúlveda, seremi de Economía, informó que “se están transfiriendo cerca de 16 mil metros cúbicos diarios de petróleo, cosa que hace dos años no existía y que ha permitido reactivar todo un encadenamiento productivo asociado al sector petroquímico, a industrias químicas”.

La autoridad profundizó en lo que significa para la región transportar de forma directa el petróleo desde Argentina.

La reactivación del ducto no sólo refuerza la infraestructura energética, sino que también impulsa oportunidades laborales directas e indirectas, ampliando el ecosistema productivo. Desde la cartera de Trabajo, la seremi Sandra Quintana valoró el impacto laboral que la reactivación genera para Biobío.

Actualmente, la empresa cuenta con tres estanques de almacenamiento de petróleo adyacentes a la Refinería Biobío, sin embargo, el aumento sostenido de los envíos ha hecho necesario ampliar esta capacidad.

Por ello, ya se encuentra en etapa de diseño un proyecto para la construcción de dos nuevos estanques, con el objetivo de garantizar seguridad en el suministro y mayor resiliencia para el sistema energético nacional.

El hecho de que Chile sea el principal comprador de petróleo argentino significa, según el seremi de Energía, Danilo Ulloa, “que nuestro país gana en soberanía energética, pero sobre todo nuestra región se constituye como un polo atractivo en esta materia”.

Ulloa sostuvo que, con la situación actual de Argentina, es difícil pensar que se puedan repetir ‘cierres de llave’ como en años anteriores. Asimismo, se refirió al desafío de promover esta vinculación entre las industrias locales.

El proyecto de ampliación del Oleoducto Trasandino será ingresado próximamente al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), en línea con los compromisos del país en materia de sostenibilidad.