Con la entrega simbólica de la llave del icónico edificio de Ongolmo N°740, en Concepción, se dio inicio formal al trabajo en conjunto del Gobierno Regional y el Servicio de Registro Civil e Identificación para recuperar el inmueble tras quince años en desuso.
Un estudio financiado por el Gore, por $115 millones, significará avanzar en la determinación del real estado estructural del edificio y la factibilidad de utilizarlo nuevamente como la oficina penquista del Registro Civil.
Para el gobernador Sergio Giacaman, recuperar esta infraestructura “tiene dos impactos: el beneficio a la ciudadanía del icónico edificio y, por otro lado, el ahorro que significa dejar de arrendar un inmueble que tiene un alto costo para el Estado”.
Giacaman cuestionó los quince años de demora en la toma de decisiones y recalcó que “no nos podemos acostumbrar a que el Biobío sea una región donde las cosas se hacen a medias y, justamente, queremos avanzar en los proyectos que se han demorado tanto tiempo para demostrarle a la ciudadanía que nos interesa que nuestra región sea una región donde las cosas se hacen bien”.
Antes de fin de año, el estudio debiera dar una respuesta sobre las opciones de recuperar la estructura y, de ser así, entregar un diseño y posteriormente establecer los costos de reparación del inmueble propiedad del Registro Civil.
La directora regional del servicio, Sandra Ibáñez, profundizó en los alcances de este trabajo y agregó que la meta, en caso de que la infraestructura sea recuperable, es que “tanto la oficina de atención al público como la dirección regional vuelvan a este anhelado edificio”.
Por su parte, el seremi de Justicia, Carlos Uslar, manifestó que la recuperación del edificio del Registro Civil es una oportunidad de “hacer más eficientes los recursos del estado” y de colaborar en la reactivación económica del sector.
Actualmente, el Registro Civil desembolsa alrededor de $55 millones mensuales en el arriendo del inmueble ubicado en la calle Chacabuco.
“Este proyecto tiene que ver con la recuperación de los espacios públicos, pero también con el buen uso de los recursos fiscales y poder brindar una buena atención a la ciudadanía, ojalá al menor costo, en un edificio propio como este”, concluyó Ibáñez.