Cuatro pudúes fueron devueltos a su hábitat por funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Biobío en un sector rural de Hualqui, mientras que dos tucúqueres fueron liberados en el sector del bosque de peumos en el Parque del Río Zañartu, en Hualpén, luego que se determinara que se encontraban aptos para su reinserción en su medio natural.

El director regional (s) del SAG de Biobío, Roberto Ferrada, destacó que «estas liberaciones fueron posible gracias al compromiso de la comunidad regional con la fauna silvestre, lo que permite la oportuna atención de la denuncia y su trasladado a un centro de rehabilitación, en este caso a Ñacurutú, con cinco ejemplares, y a la USS con una pudú, donde los ejemplares recibieron los cuidados y tratamientos necesarios para su recuperación».

Ferrada agregó que dos de los pudúes corresponden a ejemplares afectados por los incendios forestales, los cuales se recuperaron en el Centro de Rescate Ñacurutú, luego de ser encontrados, uno, en el sector Coroney de Tomé, mientras escapaba del fuego, sin quemaduras visibles o leves, y otro en otro sector rural de la comuna con quemaduras leves.

El tercer cérvido liberado también ingresó a Ñacurutú, los días previos a la emergencia por incendios forestales, luego que fuera encontrado en un sector rural de Tomé con heridas provocadas por mordeduras de perros.

El cuarto ejemplar, una hembra, recibió atención veterinaria en el Hospital Veterinario de la Universidad San Sebastián, lugar donde llegó luego que fuera trasladada por funcionarios del SAG de la Oficina Angol, región de La Araucanía, producto de las lesiones causadas por mordeduras de perros.

En el caso de los tucúqueres, estos fueron encontrados en etapa de polluelos en noviembre pasado por vecinos del sector Rafael en Tomé, siendo trasladados a la Fundación Ñacurutú, donde fueron entrenados en vuelo y caza, pudiendo ser liberados al momento de alcanzar la etapa juvenil.

Por ello, el directivo del SAG reiteró el llamó a la ciudadanía a respetar la fauna silvestre y en caso de avistamientos en su hábitat natural, cuando éstos no presenten alguna lesión o problema de movilidad «a no molestarlos y dejarlos que retornen de forma voluntaria a su medio natural, ya que la manipulación inadecuada y el cautiverio son un grave daño que se les provoca a estas especies».

Finalmente, Roberto Ferrada afirmó que «la fauna silvestre tiene un rol fundamental en el equilibrio ecológico del medio ambiente y es benéfica para la agricultura», y llamó a la comunidad regional a no mantener especies de aves y animales silvestres en cautiverio sin autorización del Servicio Agrícola y Ganadero.