Durante este año la SEREMI de Salud del Biobío ha realizado 220 fiscalizaciones en terminales de buses buscando constatar implementos de higiene y desinfectantes, espacios de ventilación y distanciamiento físico además de las acciones de sanitización en máquinas del transporte público; todo según el protocolo de Limpieza y Desinfección de Ambiente, en el contexto de la pandemia de COVID-19.

En ese contexto, la Seremi (S) de Salud Isabel Rojas llegó hasta el terminal de buses Expreso Chiguayante, junto al equipo del Departamento de Saneamiento Básico para fiscalizar las condiciones sanitarias, la Certificación de Sanitización de taxi buses y entregar las recomendaciones preventivas Covid-19 a conductores del transporte público.

Además, con el objetivo de evitar el contagio entre pasajeros al interior de los taxi buses, se han realizado 2 mil 802 controles del uso de mascarilla a nivel regional; de ellos 2 mil 189 en la provincia de Concepción; 603 en la provincia del Biobío y 10 en la provincia de Arauco.

Al respecto, Rojas comentó que se busca “minimizar los riesgos de contagio, además de inspeccionar las condiciones de higiene y ventilación de espacios en los terminales para que los trabajadores cuenten con ambientes desinfectados”.

Entre las medidas que exige el procedimiento de sanitización básico en buses está la apertura de ventanas y escotillas de la máquina para mejorar la ventilación de la misma; remover la basura superficial orgánica e inorgánica acumulada al finalizar el recorrido; la aplicación del desinfectante debe ser mediante el uso de pulverizadores y respetar un tiempo mínimo de 20 minutos para que el desinfectante actúe sobre la superficie y recién una vez que transcurra el tiempo de espera, el conductor puede ingresar a la máquina e iniciar un nuevo recorrido.