El Gobierno Regional del Biobío y su consejo celebró la votación favorable por parte del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN), que aprobó la solicitud de declaratoria del Complejo Ferroviario de San Rosendo como Monumento Histórico Nacional.

La iniciativa Puesta en Valor del Patrimonio Cultural – Industrial del Biobío recibió el financiamiento del Gore Biobío por 163 millones de pesos, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), y fue ejecutada por Fundación ProCultura, con el apoyo de la Municipalidad de San Rosendo y de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE).

El gobernador Rodrigo Díaz sostuvo que se trata de «una gran noticia». «Este trabajo lo que hace ahora es que nos permite empezar a construir un plan maestro de desarrollo para conservar y poner en valor todo el sistema de la estación de San Rosendo, el corazón ferroviario del centro sur de Chile. Agradezco mucho la declaración de Monumentos Nacionales y creo que marca una forma de trabajar que pone dentro de las responsabilidades del Gobierno Regional la tarea priomordial de ser quienes materializamos financieramente las declaraciones de Monumentos Nacionales», puntualizó.

Ahora corresponde esperar la publicación en el Diario Oficial para que el complejo alcance el estatus de Monumento Histórico Nacional y comience a regir la protección del inmueble. Mientras que el CMN enviará los antecedentes al Servicio Nacional del Patrimonio Cultural y al Ministerio de Culturas, las Artes y el Patrimonio para la revisión jurídica del expediente y firma del decreto.

Rabindranath Acuña, alcalde de San Rosendo, manifestó su agradecimiento por el trabajo sostenido «para alcanzar este gran logro de tener como Monumento Histórico Nacional a nuestro Complejo Ferroviario de San Rosendo, fruto de los esfuerzos que hemos realizado junto a la Fundación ProCultura, con el financiamiento del Gobierno Regional del Biobío».

El edil resaltó además el trabajo efectuado durante dos años con la Mesa Regional de Puesta en Valor del Patrimonio, «donde participaron el Gobierno Regional, la Empresa de Ferrocarriles del Estado, la Subdere, la Dirección de Arquitectura, el Consejo de Monumentos Nacionales, Serviu Biobío, Minvu, Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y los ex ferroviarios».

El complejo ferroviario, añadió Acuña, da sustento a «nuestra identidad de pueblo que nace a partir de la llegada del ferrocarril en 1873, hace 150 años, y por el paso de la máquina a vapor se configuró lo que hoy tenemos como pueblo».

«Por ello, justo y necesario es rescatar lo que queda de esas infraestructuras para ponerlas al servicio de la comunidad local y nacional, para disfrutar de la arquitectura industrial construida en plena revolución de la tecnología a vapor. Desde aquí proyectamos un nuevo San Rosendo, que alberga un turismo patrimonial, que es la puerta de entrada a nuestro mundo rural y sus atractivos. Esta declaratoria es el punto de inicio para, de una vez por todas, usar y poner en valor uno de los máximos patrimonios ferroviarios de nuestro país», reafirmó.

Por su parte, Alberto Larraín, director ejecutivo de Fundación ProCultura, agradeció por hacer posible este proyecto al Gobierno Regional del Biobío y al municipio local.

Además, recalcó, la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), actual propietario del complejo ferroviario, jugó también un rol fundamental, «pues renovaron su compromiso con la puesta en valor los inmuebles del complejo y nos brindaron apoyo durante todo el proceso de la elaboración del expediente».

Participación de la comunidad

Profesionales de la Fundación ProCultura trabajaron en la preparación del expendiente entre enero y junio de 2022. Durante esos seis meses se realizaron una serie de análisis en diversas materias: histórico, urbano, arquitectónico, estructural, turístico y sociocultural, los que fueron complementados con visitas a terreno para la toma de medidas y la elaboración de planimetrías, la realización de entrevistas y participaciones comunitarias que permitieron una construcción colectiva del expediente.

La determinación de los valores y atributos del complejo se trabajó de manera colaborativa con la comunidad, lo que constituye el alma del expediente, puesto que son los mismos vecinos y vecinas quienes identifican y reconocen los elementos patrimoniales que caracterizan a los inmuebles y que, posteriormente, son los que definen si tiene o no valor patrimonial para ser declarado Monumento Histórico Nacional.

Una serie de organizaciones interesadas en apoyar la iniciativa colaboraron en la construcción del expediente a través de la participación activa en la “Mesa de Patrimonio de San Rosendo”.

El Complejo Ferroviario de San Rosendo se construyó en 1929 como un gran complejo de edificios industriales de características monumentales, destinados a los requerimientos de mantención de los trenes a vapor de la época, en el que llegaron a trabajar 400 funcionarios durante el periodo de mayor auge de ferrocarriles en el pueblo.

Sin embargo, en la década de 1970 comenzó en Chile una progresiva disminución de la actividad ferroviaria, lo que provocó desde entonces una crisis para la comuna. Así, con los años, las monumentales instalaciones del conjunto quedaron en un total abandono y deterioro, siendo completamente desvalorizadas.