Según lo informado por las integrantes del Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares de la Región del Biobío (SinTraCap), siete de cada 10 personas que se desempeñan en el área han perdido sus puestos de trabajo, producto de la emergencia sanitaria en Chile.
Ésta ha sido una de las actividades más golpeadas durante la crisis detonada por la pandemia de Covid – 19, lo que se reafirma en cifras del Centro de Estudios y Encuestas Longitudinales de la Pontificia Universidad Católica de Chile, que apuntan a una importante caída: si 310 mil personas pertenecían a esta categoría de ocupación hace un año, en junio de 2020 eran 95 mil.
En ese marco, las integrantes del gremio se reunieron en la Plaza Independencia de Concepción para visibilizar esta problemática, oportunidad en la que Ana Albornoz, abogada de SinTraCap, argumentó que “en esta pandemia, las trabajadoras de casa particular han sido completamente olvidadas”.
En tanto, Joel Arroyo, vocero de la Red de Voluntarixs Biobío, se refirió a los efectos de la crisis en el desempleo juvenil y en las condiciones laborales, señalando que “el Gobierno no se ha hecho cargo de la informalidad en medio de la pandemia, sobre todo en lugares como Concepción, donde se ingresa a cuarentena y se lleva adelante gran parte de la actividad laboral provincial, dejando -probablemente- a muchas familias chilenas desprotegidas”.
Es preciso recalcar que las trabajadoras de casas particulares denunciaron la fragilidad en la que se encuentran, ya que su labor no es considerada esencial y muchas de ellas se ven enfrentadas a despidos y amenazas de recortes de sueldo.
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