Texto: Noticias UdeC

La dolorosa partida de Joaquín Herrera Urzúa hace un par de semanas, será sin duda algo que sus compañeros no podrán olvidar. Pero en honor a su memoria, el equipo de Vóleibol Masculino UdeC salió a la cancha del gimnasio de la Universidad del Bío-Bío, donde lo esperaba el conjunto local por una nueva fecha de Adesup.

Un conmovedor minuto de silencio trasladó a sus compañeros y cuerpo técnico, que esta vez fue encabezado por Miguel Dávila, a conectarse nuevamente con Joaquín, uno que siempre dejó todo en la cancha y que disfrutaba mucho jugando al deporte que amaba.

Rápidamente el Campanil sacó una ventaja de 7-3, aunque los locales reaccionaron y un par de minutos después estaban a solo dos unidades. Ahí fue cuando el capitán Benjamín Ruiz apareció en el ataque y luego fue el turno de Francisco Navarrete con el bloqueo en solitario.

Con el 12-8 llegó el primer minuto técnico pedido por el local. Hugo Valdivia con su juego ofensivo y una gran defensa de Ignacio Méndez que no tuvo respuesta en el otro lado, decretaban el 15-10.

Antonio Kuncar y Leonardo Menéndez, con una gran experiencia a pesar de sus edades, sobre todo el segundo, también marcaron diferencia. 25-16 fue el primer set para la UdeC.

El segundo parcial fue el mejor de la UdeC. Con el 5-5, el Campanil ganó 11 puntos consecutivos y se aseguró el parcial. Con furia saltó Menéndez en el punto 27 para decretar el 20-7. Benjamín Ruiz encendió las alarmas y abandonó por un par de minutos producto de una dolencia. 25-10 terminó el segundo set.

El tercer set, como suele ocurrir cuando un equipo va 2-0, fue el más parejo. 17-12 alcanzó a estar arriba el local, pero nuevamente una racha de 10-0 puso a la visita a las puertas del triunfo. Ruiz sentenció el 25-20, con el que la UdeC firmó un nuevo triunfo en Adesup.

Justamente el capitán Ruiz detalló cómo fue volver después de tan lamentable pérdida. “Súper difícil volver a la rutina de entrenamiento y también a los partidos. Hoy hubo muchos sentimientos encontrados. Fuimos al camarín y el hecho de que Joaquín ya no esté ahí marca emocionalmente, pero estamos trabajando para poder salir adelante. El equipo está más unido que nunca. Lo que hemos hablado se resume en trabajar y competir por él, que se sacaba la cresta todo el año entrenando, sobre todo en las pesas, y debemos adoptar esa mentalidad que nos dejó Joaquín como jugador y como guerrero, tal como lo mostró en la final del Campeonato Nacional Universitario y en todos los partidos”, explicó.