El subsecretario de Previsión Social, Claudio Reyes Barrientos, se refirió a la implementación de la Reforma de Pensiones a nivel nacional y regional, destacando que, en Biobío, más de 222 mil personas reciben actualmente el beneficio solidario de vejez. Esto es la Pensión Garantizada Universal y, en algunos casos, el Aporte Previsional Solidario de Vejez.

En esa línea, Reyes detalló que más de 35 mil personas pensionadas del Biobío, que actualmente reciben la Pensión Garantizada Universal (PGU) y que tienen 82 años y más, han comenzado a recibir el incremento del beneficio alcanzando $250.000 desde septiembre.

Por otra parte, y debido al efecto que tiene la Reforma de Pensiones en la Pensión Garantizada Universal, más de 24 mil personas del Biobío que cuentan con la Pensión Básica Solidaria de Invalidez (PBSI), están recibiendo el aumento de su beneficio que también se elevó a $250.000.

El subsecretario explicó que con esta reforma se crea un Seguro Social con rostro de mujer y solidario, financiado con una parte del nuevo aporte del empleador. Este seguro se construye con 2,5 puntos de cotización del empleador, que combinan el 1,5% que ya se destina al Seguro de Invalidez y Sobrevivencia, más un 1% de la nueva cotización que llegará gradualmente a un 7%. A esto se debe considerar que 4,5 puntos van directamente el ahorro individual del trabajador.

Desde enero de 2026, el Seguro Social pagará automáticamente dos beneficios nuevos: un aporte mensual permanente por años cotizados, que reconoce el esfuerzo de quienes han trabajado toda su vida, y otro aporte permanente para compensar a las mujeres por sus mayores expectativas de vida, que históricamente han significado pensiones más bajas.

Reyes indicó que el bono por años cotizados tiene algunos requisitos: “al menos tiene que haber 10 años cotizados para las mujeres o 20 años cotizados para los hombres”. Este bono equivale a 0,1 UF por cada año cotizado con un tope de 25 años. Es decir, un tope de 2,5 UF. “Transformándolo a pesos, estamos hablando de que quien haya cotizado 25 años o más, va a recibir una compensación mensual permanente de cerca de $100 mil”.

Un aspecto clave de esta reforma es la incorporación de la cotización adicional con cargo al empleador. En ese sentido, el subsecretario reiteró que este aporte adicional se financiará a partir del Seguro Social, que implica un aumento gradual del aporte del empleador hasta llegar a “cerca de un 8,5% en un período de 9 años”.

De ese porcentaje, habrá “un 4,5% que va a cuentas individuales y un 4% a la creación de este seguro social que financia tanto el bono por mayores expectativas de vida de las mujeres, como también el bono que está reconociendo los años cotizados de hombres y mujeres”.

La autoridad agregó que hay otras medidas dentro de esta reforma, como la cobranza de los pagos previsionales que no se hacen, centralizada a través de la Tesorería General de la República, o el Seguro de Lagunas Previsionales, con cargo al Seguro de Cesantía.

Finalmente, Claudio Reyes manifestó que la reforma “es producto de un acuerdo transversal de una mayoría parlamentaria, en un parlamento en que el gobierno no tiene la mayoría. Algo que ha costado tanto tiempo y que es de gran anhelo para la ciudadanía resulta ser un legado importante”.

Cabe señalar que la reforma también generará “espacios e incentivos para el ingreso de nuevos inversores de fondos de pensiones, con efectos sobre la actual concentración de la industria en manos de las AFP. Así, se ampliarán y diversificarán los operadores del sistema para reducir los costos para los afiliados”.

Con esto, “podrán concurrir a la formación de nuevos inversores personas naturales o jurídicas que cumplan ciertos requisitos, incluyendo entre estas últimas a las administradoras generales de fondos, no filiales de bancos, y cajas de compensación, con autorización de la Superintendencia de Pensiones”.

Además, para promover una baja en las comisiones, cada dos años se licitará el 10% de afiliados actuales, seleccionados aleatoriamente. Se adjudicará la administración del ahorro previsional de este grupo al oferente con la menor comisión, el cual deberá mantener dicho precio por 5 años, aunque no estarán obligados a permanecer en ella. Tras esos 5 años, y hasta otros 5 años adicionales, en caso de que se produzca un aumento de la comisión, se establece como consecuencia que los afiliados de la administradora puedan ser seleccionados en un mayor porcentaje para ser licitados, de forma de promover precios más bajos.

Eso sí, las y los trabajadores que se integren al sistema serán afiliados automáticamente al inversor que cobre menor comisión.

Revisa en este link más detalles de la Reforma Previsional y la entrevista completa con el subsecretario de Previsión Social, Claudio Reyes Barrientos: