Luego de casi dos años de trabajo, la Comisión para la Paz y el Entendimiento hizo entrega al Presidente Gabriel Boric del informe final con los resultados de su labor, bajo el mandato de proponer las bases de una solución de largo plazo a la problemática territorial entre el Biobío y Los Lagos. El acuerdo en torno a este documento cuenta con el respaldo de siete de los ocho comisionados.
Autoridades políticas de todo el país y de los diferentes sectores políticos concurrieron al hito de presentación de este informe, efectuado en el Palacio de La Moneda, y que consideró intervenciones de los dos co-presidentes de la Comisión: Alfredo Moreno y Francisco Huenchumilla.
En primer lugar, Moreno sostuvo que este trabajo “marca un momento histórico para Chile” y manifestó “la convicción profunda de que la paz es posible cuando nos atrevemos a dialogar, a escucharnos y a construir juntos”.
Este proceso, afirmó el ex ministro, “nos permitió comprender en profundidad tres realidades que ya no podemos seguir ignorando como país”: La espera de las comunidades que viven en la pobreza y el aislamiento, los territorios marcados por la violencia y el estancamiento en zonas como la Provincia de Arauco.
El sistema actual de adquisición de tierras, recalcó, “no sólo es deficiente, es uno de los principales factores que agrava y perpetúa el conflicto que vivimos”.
Moreno relevó “la voluntad de construir un futuro diferente” y profundizó en el “nuevo camino” que sugiere la Comisión. “Proponemos pasar de un sistema que sólo entrega tierras a uno que abre múltiples caminos para el desarrollo”, afirmó.
Ante las críticas, llamó a “mirar lo que se pudo lograr en esta Comisión” y planteó que “nosotros elegimos creer en Chile”.
Por su parte, el senador Huenchumilla recalcó que “el camino para resolver los conflictos, porque todas las sociedades humanas tienen conflictos, es la política, y la política es diálogo, la política es escuchar, es tolerancia, es transacción”.
Respecto de la labor de la Comisión, el parlamentario indicó que “nosotros no inventamos nada en el diagnóstico, en los números y en los recursos. Lo nuestro fue inventar un mecanismo de salida” a partir de la normativa vigente.
Junto con señalar que “a lo mejor no es un trabajo perfecto, pero está hecho pensando en sentar las bases para resolver este conflicto”, manifestó que “nuestra responsabilidad termina con la satisfacción del deber cumplido en la misión que nos encomendó el señor Presidente”.
Finalmente, Huenchumilla hizo un llamado a las autoridades políticas, tanto del actual gobierno, como de la administración que asuma a partir del próximo año, a “no dejar esta propuesta en algún cajón y poner empeño y voluntad política para sacar esto adelante”.
Luego de agradecer la labor de las comisionadas y comisionados, el Presidente Boric recordó que en junio de 2023 les fue encomendada “una tarea tremendamente compleja, que requería un tratamiento cuidadoso y prudente: construir las bases para una solución de largo plazo al conflicto del estado de Chile con el pueblo mapuche y proponer un camino para la paz”.
En este proceso, recalcó que “la violencia y el terrorismo no tienen cabida” y que “los condenamos de manera clara y contundente”.
Ahora, sostuvo que “lo responsable es estudiar el trabajo de la Comisión y sus recomendaciones, entender y valorar el esfuerzo que hay detrás de este acuerdo”.
El mandatario indicó además que “el país, más allá de las contingencias y de la reyerta propia de la política, sabrá aquilatar y agradecer este histórico aporte”.
La Comisión para la Paz y el Entendimiento estuvo integrada, además de Alfredo Moreno y Francisco Huenchumilla, por las parlamentarias Carmen Gloria Aravena y Emilia Nuyado, por el ex alcalde y consejero constitucional Adolfo Millabur, por la encargada de la Unidad de Pueblos Originarios del Gobierno Regional de Biobío, Gloria Callupe; por el presidente de la Asociación de Agricultores Malleco, Sebastián Naveillan; y por el abogado Nicolás Figari. Además, el hoy subsecretario del Interior, Víctor Ramos, cumplió la labor de secretario ejecutivo.
Entre julio de 2023 y enero de 2025, las distintas actividades contaron con la participación de más de 5 mil personas de 31 comunas de las regiones del Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos.
La participación incluyó a representantes de la administración del Estado, autoridades de Gobierno, parlamentarios y parlamentarias, dirigentes, partidos políticos y autoridades locales; así como autoridades tradicionales del pueblo mapuche, comunidades y líderes territoriales; representantes del sector privado, de las empresas forestales, agrícolas y ganaderas; víctimas y organizaciones de víctimas de violencia rural; y representantes de iglesias, centros de pensamiento, universidades y otras instituciones académicas, organismos y fundaciones internacionales.