Ted Gioia, connotado crítico de jazz e historiador musical estadounidense, escritor de los libros “La Historia del Jazz” y “Delta Blues”, reconocidos por The New York Times , publicó a inicios de diciembre su selección de discos favoritos de este 2020, entre los que se encuentran “Fetch the Bolt Cutters” de Fiona Apple, “Djesse Vol. 3” de Jacob Collier y “Abismo de los pájaros” del músico chileno Mauricio “Mauro” Arias Contreras.
“Me enteré porque creí que era un error de Spotify. Un día me metí y vi una cantidad de oyentes que nunca había tenido y lo conversé con Alonso Andrade. Él también tiene una canción en la plataforma y me decía que no le había pasado eso. Entonces ingresé a mi perfil de artista de Spotify y comprendí en qué playlist estaba y quienes eran las personas que me estaban escuchando, después vi de quien era el playlist, lo busqué en internet y entendí lo que estaba pasando”, indicó sorprendido el músico chileno, quien grabó el disco durante el 2019.
El reconocimiento causó gran asombro ya que el también guitarrista reconoció que no realizaba difusión a gran escala de su música, sólo la compartió con amigos y cercanos. “Cuando entendí lo que pasaba fue sorpresivo, porque me di cuenta de quién era la persona que había hecho esta lista y también porque compartía con discos de músicos que me encantan, por ejemplo, hay un disco de Jacob Collier, que fue nominado a Álbum del Año en los Grammy. En cambio, mi disco no está tan bien producido, es grabado en casa, donde puse lo que me fluyó y fue medio improvisado, entonces es increíble. Realmente me honra que este crítico crea que el disco es suficientemente valioso como para colocarlo en medio de estos otros, es algo que nunca esperé, me halaga y motiva a seguir trabajando y mejorar”.
El disco “Abismo de los pájaros”, de casi 30 minutos de duración, contiene 6 temas, 5 canciones y una musicalización de un texto escrito. “Trata temas que son oníricos, reflexivos y algo crípticos, digamos que hay mucho simbolismo, un aire de ensoñación, aunque algo más oscuro. También hay historias, por ejemplo ‘La luna y la noche’. La música es una mezcla de sonidos latinoamericanos y españoles junto a aires de jazz fusión, pero también es un formato minimalista, por ejemplo, no hay batería, sólo percusiones o sonidos hechos con la boca o las palmas, es un disco que intenté fuera lo más minimalista posible, para mostrar la guitarra. Es muy instrumental”, señaló a grandes rasgos el cantautor sobre el álbum que se encuentra disponible en todas las plataformas musicales.
Este proyecto fue grabado íntegramente desde las casas del músico y sus amigos y además se registraron sonidos desde la costa y el campo de la octava región, tarea en la que participó Alonso Andrade Ulloa, técnico en sonido y encargado de grabar y mezclar las composiciones. El ingeniero en sonido David Valenzuela, de Estudio Araucaria, fue el encargado de masterizar las pistas, en las que también participaron Carla Leal Martínez, Paulina Véjar Valdés y el propio Andrade grabando coros, voces y palmas, entre otros sonidos. En cuanto a las letras, también participaron Matías Soto Moscoso y Véjar, quienes son autores de “Creencia” y “El guardián de la orilla”, respectivamente.
El arte de la portada también fue un trabajo realizado a mano por el propio artista junto a Véjar, en una actividad a la que llamó un «experimento de improvisación gráfica».
Sobre Ted Gioia y su lista de los 100 mejores discos del 2020
Además de crítico e historiador, Ted Gioia también es profesor, pianista y productor musical. Además, es uno de los fundadores del programa de Estudios del Jazz en la Universidad de Stanford. Recientemente publicó su libro “La música: una historia subversiva”, el que fue considerado por El Mundo como uno de los 20 mejores libros de no ficción del año.
Sobre su propia selección de los 100 mejores discos del 2020 y los criterios que aplicó para elegirlos, Goia menciona que su lista está llena de música que disfruta y cree que otros también lo harán, especialmente si “tienen un oído razonablemente bueno y mente abierta”.
“Me gustan las grabaciones que muestran algo de talento y creatividad, un sentido del estilo, musicalidad sólida, y un compromiso emocional al momento de tocar. Aprecio cuando un artista posee un sentido musical tradicional; por otro lado, no quiero ver una imitación del pasado. Cuando la música me parece demasiada formulada, artificial o fría, comienzo a perder interés (…) Así que si quieres reírte de mí por honrar a alguna estrella campestre jubilada, un álbum celta pasado de moda, puedes hacerlo. Pero también revisa algunos de los títulos menos conocidos en la lista… es posible que quedes agradablemente sorprendido por lo que escuchas”, escribió el crítico en su sitio web.
Escucha aquí el disco de Mauro Arias Contreras.