Una investigación llevada a cabo por Claudia Barría (U. de las Américas), Guillermo Ferreira (U.de Concepción), Bernardo Lagos (U. de Concepción) y Carola Montecino (u. de las Américas), analizó la efectividad de las cuarentenas en Chile durante la pandemia, a nivel nacional y por región, a partir de la información publicada por el Ministerio de Salud.

Los resultados que obtuvieron los investigadores fue que un 75% (12 de 16) de las regiones tuvo una cuarentena de Fase 1 efectiva para controlar la infección y reducir el número de casos  de COVID-19. Las principales regiones que experimentaron una disminución de casos fueron las ubicadas en el norte y centro de Chile. En relación con la Fase 2, el 31% (5 de 16) de las regiones mostró efectividad en el manejo de la pandemia por COVID-19. En las otras regiones, en la Fase 2, la efectividad fue nula.

“En las regiones localizadas en el norte como en el centro de Chile hubo efectividad en la aplicación de las cuarentenas en Fase 1 como estrategia para evitar el aumento de contagios por COVID-19, según lo descrito en el análisis de intervención; además, se observó durante el primer trimestre de 2021 un aumento progresivo de los contagios, hospitalizaciones y muertes. Con respecto a la Fase 2, se puede señalar que no lograron reducir significativamente los contagios en la mayoría de las regiones, sólo evidenció una efectividad en tres regiones del norte y dos del centro, en particular las regiones 2, 3, 4, 5 y 6, que presentaron reducción de casos después de ser intervenidas por estas cuarentenas”, comenta el académico del Departamento de Estadística y parte del estudio, Dr. Guillermo Ferreira.

Consultado por la posición de Chile en cuanto a la efectividad de las medidas tomadas, el académico señala que “en el contexto internacional, la evidencia mostró que, en otros lugares del mundo, durante el mismo período, se logró detener el contagio a través de acciones como la prohibición de viaje. Por ejemplo, Australia disminuyó en un 79% la importación de COVID-19 y retrasó el brote hasta mayo de 2020, al cerrar fronteras. En Chile se cerraron las fronteras a fines de marzo 2020, sin embargo, ya había permitido el ingreso de personas desde el extranjero con reducidas medidas de control epidemiológico y bloqueo de brote. Además del cierre de frontera, a fines del mismo mes, se decretó toque de queda nocturno, cordones sanitarios y cuarentena en la región Metropolitana, medidas que al pasar las semanas también se extendieron a otras regiones”.

El desarrollo de este estudio titulado “Assessing the effectiveness of quarantines in the COVID-19 pandemic in Chile using bayesian structural time series models” se llevó a cabo durante un año y para ello se utilizaron los análisis de intervención proporcionados por los modelos Bayesiano de series temporales estructurales para evaluar el efecto causal entre las tasas de infecciones por COVID-19 y las tasas de población en cuarentenas de Fase 1 y Fase 2 en el período de marzo de 2020 a marzo de 2021 en diferentes regiones de Chile.