Con el objetivo de coordinar acciones conjuntas para el desarrollo productivo de la comuna y de la región, el Comité de Infraestructura y Logística de la Cámara de la Producción y del Comercio, CPC Biobío, sostuvo una reunión con el alcalde de San Pedro de la Paz, Javier Guiñez, oportunidad en la que se planteó la importancia de modificar el proyecto de construcción del Puente Ferroviario para que permita la circulación de trenes de carga de doble stacking.

La reunión fue encabezada por David Fernández, presidente del Comité de la CPC Biobío; Pablo Bluas, gerente de Ultramar; Francisco Rodríguez, gerente de operaciones de Lota Protein; y Peter Stengel, gerente de Fistur. En tanto, el alcalde Guiñez estuvo acompañado por Patricio Bernal, director de la Dirección de Obras Municipales (DOM).

Ante el evidente colapso que se viene dando hace años en la Ruta 160, Fernández destacó la posibilidad de reunirse con una autoridad “realmente preocupada por las cosas que afectan a su comuna y también a la Región del Biobío”.

Asimismo, profundizó en el “tremendo error que se puede cometer al no modificar el proyecto del nuevo Puente Ferroviario, el que permitiría circular con trenes a doble altura reduciendo a la mitad la circulación de camiones”.

La construcción del nuevo puente ferroviario en la zona a cargo de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE), reemplazará al existente, que tiene 133 años en operaciones, lo que para el alcalde Guiñez representa una oportunidad de “ponernos de acuerdo con la autoridad regional, con las autoridades comunales, y plantear en conjunto la necesidad de que este puente quede en condiciones de resistir una carga superior”.

El jefe comunal se refirió además a la urgencia de planificar a largo plazo, entendiendo los problemas de conectividad que enfrenta el área metropolitana de Concepción.

Ambas partes comprometieron gestiones para coordinar una reunión con el presidente de EFE para presentar antecedentes que permitan mejorar las condiciones del proyecto, que tiene un costo aproximado de 220 millones de dólares, y que permitirá mejorar la calidad de vida de la comuna y la competitividad productiva de la Región del Biobío.