De manera unánime y con el voto de todos los integrantes presentes, la Comisión especial de la Mujer y la Igualdad de Género del Senado aprobó en general el proyecto de ley conocido como «Ley Antonia», el que modifica varios cuerpos legales con el objetivo de mejorar las garantías procesales, proteger los derechos de las víctimas de delitos sexuales y evitar cualquier proceso de revictimización. La iniciativa, que cumple su segundo trámite y cuyo nombre alude a la memoria de la joven Antonia Barra, comenzará a ser estudiada en particular por la comisión, luego de que la Sala autorizara la discusión de su articulado antes de ser llevada al pleno.

Durante la jornada, los representantes de la Cámara Alta tuvieron la oportunidad de escuchar al padre de Antonia, Alejandro Barra, quien destacó la importancia que posee para el país el avance de este proyecto, pero advirtió sobre la necesidad de generar cambios legales e implementar instructivos que permitan a los fiscales tener una mejor aproximación a este tipo de delitos. «La gente que tiene que velar por investigar no está preparada. Nosotros hemos sido víctimas, porque la investigación ha sido muy pobre por parte de la Fiscalía al determinar por qué una mujer comete suicidio», sostuvo el padre de la joven.

 

En ese sentido, la gerenta de la Unidad de Víctimas y Testigos de la Fiscalía Nacional, Erika Maira, expresó su compromiso para avanzar en evitar la victimización secundaria de las mujeres y presentó algunas de las normas que serán incluidas en el proyecto de ley para tal fin.

 

Votación en Congreso Virtual

El mencionado proyecto de ley fue puesto a disposición de la ciudadanía a través del portal Congreso Virtual, donde no solo fue posible votar, sino que también opinar y hacer sugerencias al respecto. En el caso de la denominada «Ley Antonia», un 95,7% de los 1.488 participantes votó a favor a la moción, con un 55% de contribución femenina y un 43% de apoyo masculino.

Dentro de los 395 comentarios que fueron emitidos por los congresistas virtuales, relacionados tanto con la idea de legislar como con las preguntas asociadas al proyecto, se destaca que «es correcto que el sentido de la norma sea considerar factores que antes eran invisibilizados» y que «este proyecto de ley se hace necesario y es pertinente aplicar penas duras para este tipo de delitos». En tanto, dentro de los posicionamientos negativos, se planteó que «no es adecuado considerar el género de la víctima. Los delitos sexuales no tienen género, afectan a hombres y mujeres por igual».

Cabe recordar que esta iniciativa tiene su origen en una moción de varios diputados de todos los sectores y que en lo fundamental modifica siete cuerpos legales sobre delitos sexuales.