En 2018 Ñuble se convirtió en una región independiente cumpliendo el anhelo de las y los habitantes que celebraron la separación de Biobío. Sin embargo, este proceso de desvinculación continúa en curso en 2023 generando impactos en la pesca artesanal, un sector vital para la economía de Ñuble. La problemática radica en que la zona marítima compartida entre ambas regiones no fue separada, permitiendo que grandes embarcaciones operen en el mar de Ñuble y Biobío durante 10 años.

Dirigentes y dirigentas reclaman que esta situación afecta más a Ñuble, con la presencia de barcos pesqueros de gran tamaño, tal como lo indicó Palmira Bastías, presidenta de los pescadores artesanales de Cobquecura.

La pesca artesanal es la más afectada. Adrián Cañicul, del sector Rinconada de Taucú en Coquecura, comentó que la presencia de estos barcos afecta el producto que ellos recogen.

Las autoridades consultaron a la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura para revertir la situación, mientras buscan proteger la zona mediante el Ministerio de Medio Ambiente y evitar la entrada de barcos que afecten la Lobería de Cobquecura, considerada santuario de la naturaleza. Así lo expuso Julio Fuentes, alcalde de la comuna costera.

La labor de fiscalización también es importante para ver qué barcos se acercan a esta área. Rodrigo Baeza, seremi de Bienes Nacionales de Ñuble, aseguró que se está evaluando por parte de dicha cartera un terreno para la implementación de una alcaldía de mar que pueda inspeccionar con mayor rigurosidad esta situación.

Estas propuestas buscan solucionar esta problemática que durante los últimos cinco años ha afectado a los pescadores y habitantes de Cobquecura y de la costa de Ñuble.

La extensión de esta medida hasta 2028 ha generado inquietud, situación que esperan se pueda revertir.

Fuente: Diario La Discusión.